Carta al editor

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León Neumann

Resumen

A propósito del editorial que lleva por título "Que se siente vivir con Vitíligo" (Dermatol. Rev. Mex. 2024; 68(5): 593-595) de la Dra. Karen Férez Blando a quien no he tenido el gusto de conocer, pero admiro su valentía al escribir sobre su propio padecimiento. No es fácil para cualquier persona hablar o escribir sobre sus males y menos siendo médico y especialista de la piel.


El tener un padecimiento del órgano que uno pretende curar o mejorar, quizá nos hiciera a los médicos más empáticos con los pacientes y no actuar como muchos colegas lo hacen sobre todo en algunas instituciones del sector salud donde el médico pretende terminar la consulta antes de que el paciente pueda contarle cuál es su problema.


Nuevamente mis felicitaciones a la Dra. Férez


 


Dr. Leon Neumann


dermocirugia1@gmail.com


 


 


Estimado Dr. Neumann,


Me siento honrada por sus palabras tan amables en relación con el editorial "Qué se siente vivir con Vitíligo". Como paciente y dermatóloga entiendo que tengo la responsabilidad de visibilizar lo que muchas personas con esta condición atraviesan, más allá del aspecto médico.


Coincido plenamente con usted en que vivir con una enfermedad de la piel puede sensibilizarnos como médicos y hacernos más empáticos. En mi experiencia y la de mis pacientes, el vitiligo rara vez genera empatía y a menudo es subestimado y menospreciado ya que no pone en riesgo la vida. Muchos colegas lo consideran "sólo una condición estética que afecta por vanidad", pero quienes tratamos pacientes con vitíligo sabemos que la calidad de vida puede verse profundamente afectada, incluso cuando la superficie corporal afectada es mínima. La mancha en la piel puede no parecer amenazadora, pero la carga emocional y psicológica que representa –esa “espada de Damocles” que siempre pende sobre ellos– es real y constante.


Le agradezco de todo corazón sus felicitaciones y me siento muy afortunada de recibir un reconocimiento de un colega, en especial con su trayectoria. Ojalá en un futuro cercano tenga el placer de conocerle en persona y compartir nuestras experiencias en pro del bienestar de nuestros pacientes.


 


Un cordial saludo,


Dra. Karen Férez Blando


 


 


 

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